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A veces, volver a ti
es el inicio de todo.

No necesitas tener todo resuelto.
Solo estar dispuesto a escucharte
sin juicio, sin prisa, desde lo que hoy está vivo en ti.

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“No se trata de llegar a ningún lado. Se trata de quedarte contigo sin irte.”

Gloria, R.

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No vengo a decirte quién eres. Vengo a acompañarte mientras lo recuerdas.

Gloria, R.

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SER GLORIA

Aquí estás.
Frente a lo que has evitado, frente a lo que duele, frente a lo que necesita ser dicho.
No necesitas saber por dónde empezar. Solo quedarte un momento.
Escuchar lo que viene. Nombrar lo que pesa.
La silla está vacía, pero lo que traes está lleno de sentido.
Y este puede ser el primer paso para dejar de huir de ti.

A veces no pasa nada.
Y a veces, solo por sentarte, ya empezó todo.

SENTARME

ACOMPAÑAMIENTO GESLTAT

LA SILLA VACÍA

Lo que está en ti también puede guiarte

Cada herramienta que uso es una invitación.
Tú decides cómo y cuándo abrirla.

Hay partes de ti que no necesitan ser entendidas.
Solo sostenidas.

No todo se resuelve.
No todo se explica.
Hay cosas que solo se sienten, se atraviesan y, con el tiempo, se integran.

Ser Gloria - Terapia Gestalt

Ser 
Gloria

Habitarte también es una forma de sanar.

A veces no sabemos por dónde empezar,

pero algo dentro ya nos pide volver.

Volver a sentir, a mirar hacia adentro,

a dejar de fingir que todo está bien.

Ser Gloria es ese acompañamiento,

humano, presente, profundamente real.

No se trata de guiarte desde afuera,

sino de caminar contigo sin prisa.

Lo que duele también necesita espacio.

Lo que callas también merece ser oído.

Aquí,

no hay juicios, ni exigencias.

Solo un lugar donde puedes ser tú,

donde lo que sientes es válido.

No importa si llegas con miedo,

o con el corazón hecho pedazos.

Puedes empezar hoy.

Así, sin más.

Ser Gloria - Terapia Gestalt

Acompaño tu proceso

con respeto,

presencia y cuidado

Cada proceso es único. Pero reencontrarte siempre deja huella.

Mujer disfrutando el desayuno
“Llegué con miedo de no saber por dónde empezar.
Y me encontré con alguien que supo acompañarme sin empujarme.”

Claudia Gomez

León, Gto.

Hombre en banca
“Nunca me sentí juzgado. Solo escuchado.
Y eso, aunque parezca poco, lo cambió todo.”

Paco Treviño

Guanajuato

Mujer sentada en casa
“No sabía que se podía sanar sin tener que explicarlo todo.
Aquí aprendí a sentir sin pedir permiso.”

Gabriela Hernandez

Guadalajara

Mis escritos

Si algo de lo que leíste 
rezonó en ti, tal vez en momento
de empezar

No necesitas tener todo resuelto.
Solo estar dispuesto a escucharte
sin juicio, sin prisa, desde lo que hoy está vivo en ti.

Escucharte puede ser el inicio de algo que aún no sabes cómo nombrar

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